sábado, 21 de mayo de 2016

Lo siento.

Cuántas veces habré soñado con estar a tu lado, y si no es a tu lado, un poco más cerca. Solo quería estar un poco más cerca... "a quince minutos", como dijiste una vez.
Cómo duele haber sido tu decepción, no haber cumplido tus expectativas, no haber sido como tú esperabas y no haber tenido el enorme placer de salvarte.
Cómo duele que nunca vayas a saber nada de esto, y que, a pesar de todo, el destino no lo haya querido. Cómo duele que a la vida no le gustásemos juntos, cómo quema este consuelo.
Ya no sirve de nada pensar en ti a todas horas, en cómo sería mirarte a los ojos, o abrazarte. Ni en tu olor, tu piel, tus manos. No sirve de nada ilusionarse en vano. Nunca tendré nada de eso, porque de otra, serás de otra... como antes de mis besos.
Tu voz, tu cuerpo claro, tus ojos infinitos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario